sábado, septiembre 16, 2006

Moderno, pero español


Observen que letra:
Yo soy un hombre del siglo XX, pero español. Es tanto como reirse del mundo entero, menos de dios.
Si existía la sublimación de lo cañí, bien puede ser esto. El suceso se da en una película de Manolo Escobar de título prodigioso: En un Lugar de la Manga. La canción: Moderno, pero español. ¿Querrá eso decir que no es maricón, que es creyente y que desprecia todo cuanto no conoce?

Si hay algo que hemos tantas veces repudiado en nuestro particular proceso como país con complejo de inferioridad, eran cosas como ésta. Si había cosas que te hacían no sentir que eras español, o no desearlo y desde luego volcarte en que es mucho más interesante ser vasco, catalán o, simplemente apátrida y republicano, era el sustrato, la ética y la estética de fragmentos como éste.

Reconciliarse con España es una tarea pendiente. Horteradas, vulgaridad, cutrerío, patrioterismo hay en todas partes, he podido comprobar. El nuestro tienes sus peculiaridades, pero en vez de sentir urticaria quizá sea hora de reirse amablemente de ello. Manolo Escobar resulta hoy un tipo bastante interesante, un apasionado coleccionista de pintura que, parece ser, supo hacer su fortuna sin hacer mal a nadie.

Se lo vean, que se van a reir. Y si se quitan prejuicios, verán que hay una gran técnica en el trabajo de este señor y sus canciones. Aunque no sean mi entretenimiento favorito.