jueves, enero 31, 2008

Historicismos


Cuenta un historiador que la lucha contra el francés "fue nada más y nada menos que el nacimiento de una nación". De modo arrebatador, nos advierte del pobre reflejo que, nosotros, este pueblo adusto y poco querido de sí mismo, hemos dado a tanta hazaña al ser comparada con la gama de epopeyas que la cinematografía norteamericana ha llevado a cabo con sus orígenes nacionales en forma de guerras esclavistas y exterminio de indígenas.

Yo diría más, diría que ni siquiera se han escrito las grandes sagas de los reyes de Shakespeare. Fíjense qué bonito: "Aurora Bautista soltando cañonazos, Curro Jiménez y aquel disparate, El orgullo y la pasión, en el que Frank Sinatra y Sofia Loren hacían de guerrilleros, con Cary Grant de oficial inglés". Pero en las explicaciones periodísticas de las argumentaciones del sabio investigador, una afirmación es absolutamente inquietante:
El pueblo español no luchó por unos valores de progreso, sino por la patria como elemento emocional e identitario, la nación como expresión de la soberanía popular y un Estado unitario y centralista que, hasta entonces, no había existido.
Algunos deberían tomar nota de que, efectivamente, España tal y como la llamamos hoy, no existía antes de aquello, por mucho rey católico (y reina: menuda paridad, señora De la Vega) que conquistara Navarra con soldados guipuzcoanos. Puede que la historia confirme que, efectivamente, incluso catalanes y vascos se vieron conmovidos por la patria española en contra de sus propios cuentos chinos. Divertido es un rato, aunque francamente inútil.

Obsérvese que ninguno de ellos, según este caballero y bien parece que dice verdad, los llamados pueblos de España mostraron un interés especial en ninguna democracia de sustento. Lo interesante del caso no es que esto sea verdad o mentira, tal es la misión de la historia entendida como ciencia, por limitado que sea esto y por posible que sea contar con un método de trabajo orientado a extraer los hechos y separar la propaganda del suceso. Lo interesante es que en la defensa de la nación española gustan ahora los contemporáneos de basarse en este episodio para confirmar la realidad de la nación, que no es otra cosa que confirmar su inevitabilidad.

Siendo tan liberales algunos, incluída Esperanza, sorprende que no recuerden a Popper. Creer que un acontecimiento histórico implica un devenir, una ley, una razón de ser, podría convertirlos en hegelianos, marxistas y en hasta nacionalistas. La sorpresa es mayor en cuanto que es la misma munición que la celebración del milenario de Cataluña que organizó el señor Pujol, o la que dispara Artur al borde de las lágrimas ante la tumba de Guifré el Pilós (menos mal que esos franceses tan malditos profanaron la tumba de Isabel y no nos quedan sus cenizas para que bien Aznar, bien Bono o los dos, tengan la ocurrencia de ir a juramentarse). La misma ración de sopa de letras inevitables con las que da de merendar el Lehendakari, su partido, casi toda su oposición, día sí, día no, a los cruzados del pueblo que persiste agazapado debajo de un roble desde que la historia no tuviera ese nombre. En serio, no es Astérix.

Hasta ahora, la crítica intelectual al (los) nacionalismo(s), se basaba en el descubrimiento de las falsedades, las recreaciones y las inventivas sobre pasados inexistentes entendidos como frustraciones psicológicas de los vivos ante cosas que no han vivido o imaginan. Se le llama mito. Frente a ello, se argumentaba la superioridad de los derechos individuales, la condición de ciudadano sobre cualquier condena impuesta por los muertos o su recuerdo. Valía para todos, pero como Aurora Bautista disfrazada resultaba más parecido a un tebeo amarillento que a una novela de Tolstoi, el 2 de mayo era sólo una excusa para hablar de pintura.

En prueba de la pobreza intelectual que acaparan los políticos de las listas cerradas y su colección de fundaciones de propaganda que financian con nuestros impuestos, el argumentario ideológico para pedirnos que elijamos con quién cabrearnos ha recurrido a lo mismo: a vanagloriarse de una leyenda. El delirio de Rosa Díaz no mejora el asunto, y los ciudadanos de Rivera se quedan sólo en la resistencia y en un galimatías literario para decir que son de centro izquierda. Es lo que hay.

miércoles, enero 30, 2008

Bananero


Vuelve el juego de las sillas musicales. Bananero. Zapatero. Esa rumba por conservar la poltrona.

Vuelve la solidaridaz bien entendida, esa que significa que te quitan el dinero progresivamente y progresistamente y te lo devuelven de a ración, porque todos somos iguales.

Vuelve la engañifa, si es que marchó, el caballero de la triste figura que un día te dice que ha salvado al país porque tiene ley para dependientes sin dotación presupuestaria pero mañana les dice a los dependientes que les devuelve el dinero porque es muy ahorrativo.

Vuelve la improvisación (¿la malversación?) en la que por la mañana te da dinero y por la tarde te cuenta que no da, que es un menor quitar, que no son cuatrocientos, sino doscientos, que doscientos más irán mesecito a mesecito descontado en el sobrecito de la nómina (los que saben de algo en ese partido, teniendo que salir en público morados, amarillos, diciendo cosas educadas para no llamarle lechuguino).

Vuelve el bochorno. ¿Tan desesperado está, tan oscura ve la victoria del progreso tras repartir dinero a los sin piso, cheques a las parturientas, esperanzas a los jubilados, que ahora viene el pan para todos? El rey de Marruecos se sube a un caballo y arroja monedas de oro a la plebe, dadivoso él.


Disclaimer: alguien podrá decir que es de lo más libegal devolver dinero. Pudiera ser, si correspondiera a los conceptos adecuados. Todos sabemos que no.

Corolario: ¿Entonces es compra de votos? El cultivador de bananas se ha ofendido muchísimo cuando se lo han insinuado. Ha puesto una de esas caras suyas de actor que estudia sus gestos y se le ve a lo lejos (este tipo miente mucho mejor por la radio) y ha dicho que los españoles (los vascos deben estar fuera del reparto, se comprueba la eficacia y razón de ser del concierto: en Madrid te timan) son suficientemente inteligentes para no dejarse influir en su voto. Es decir, que concede que no votarle a él es una opción inteligente entre las posibles. La estética no le ayuda nada: el dinerito sólo viene si gana él, o le pone a güevo espetarle a su oposición si se lo va a quitar (como si no fuera suyo de antemano) si le ganan.

Bis: Se abre el telón y sale Carod Rovira con el cheque de José Luis. ¿Cuál es el monólogo? ¿Ser o no ser? ¿Es el dinero de los catalanes el que se reparte entre todos?

Sentimiento trágico de la vida: Queridos amigos con fe en el progreso. Estimado Sr. de Toro (el del boj trastocado en José Luis). Deben decirnos si no sienten vergüenza ajena.

Análisis para la historia: en la entrevista por entregas con el marido de la diseñadora de moda Sra. Ruiz de la Prada, experta mundial en cambio climático según Antena 3, pudo comprobarse que el tipo, el feliz aprendiz de sastre, había superado la fase de aprendiz para dominar los resortes del manejo del poder. Y eso que no le ha cambiado. Una frasecita delataba tanto su progreso como su bisoñez previa: decía más o menos que, ante noticias urgentes, trágicas o apresuradas, nunca debe aceptarse lo que se cuenta en la primera hora. Decía, si la memoria no me falla - ganas no me quedan de buscar el enlace - que "una vez más, se comprueba". La repetición, el fallo/error, madre del cordero del aprendizaje más básico, en todo su esplendor. Los que han pisado al menos concejalía suelen haberlo aprendido: en nuestras carnes pagamos la pobreza de la clase política de las listas cerradas.

Puesta en marcha del Plan B: Si hacer que el mundo progrese con tanta igualdad de hombre y mujeres, civilizaciones aliadas, energías renovables y desaladoras mágicas, tanto compromiso en que él será educado, si tanto parecer el Palmerín de Inglaterra de nuestros derechos y libertades no sirve para ganar, ¿hay que darle al pueblo lo que vulgarmente quiere que es pan y circo? Una de canon y otra de cheques para pañales.

Conjetura Uno: la ocurrencia se ha debido parir donde Taguas. Economista de servicio de estudios. Como Sebastián, pero éste era el segundo. El valor de la experiencia para quien asume la responsabilidad se destaca nuevamente - asumida la certeza de la conjetura - como irreemplazable en la solvencia de los que toman decisiones.

Conjetura Dos: este no le aguantaba un asalto a Pizarro. Ni a Rato. Ni a Artur ni a Durán si se pelearan por la misma silla. Mariano, el hombre, como dice él mismo con sus propias palabras en la segunda entrevista en fascículos del marido de la Sra. Ruiz de la Prada, "es un señor de Pontevedra". Eso es síntesis y lo demás puñetas.

sábado, enero 26, 2008

Motivos para creer


Démelos, señora vicepresidenta: en ese altavoz de sandeces que es un telediario de cualquier cadena pública o privada, la escucho decir que los señores de la cosa popular lo único que quieren es recuperar el poder. Como si usted no quisiera perderlo.

Moore (no: Michael, no)


¿No les gusta Julianne Moore? No, no digo que les atraiga la Juliana con una mirada libidinosa, que están en su derecho. Sino si les gustan los personajes que hace: qué sensación de relajación y simple humanidad me producen. Está de bolos: nos traen una nueva película en la que aparecerá con su cabellera pelirroja y ojos tristes, que no entristecidos:
Cuando conocí España, en el verano de 1979, era una adolescente que vivía en Alemania y desconocía la figura de Franco y lo que representó. Entonces España me pareció un lugar incómodo y oscuro. Cuando volví para rodar la película me quedé impresionada. Hoy me parece un país abierto de mente, lleno de gente tan emocional como profesional.
(Tópicos y bucolismos aparte, uno suele decir, como creo recuerdan, que dramatismo, negrura y cante jondo - en lo desgarrado - sólo es algo que queda para los mitos. Mitos que sirven para alimentar justificaciones de todo tipo en esa parte de la vida que se vive a solas con la mente. Es verdaderamente cansina la asociación del país a Paco, el general más joven de Europa, entre los foráneos como entre los nativos. La vida es demasiado normal, en su propia vulgaridad y su escondida belleza. Como no puede ser menos. Guárdense la patria en un armario con bolas de alcanfor. Por nostalgia, no porque la vayan a necesitar).

viernes, enero 25, 2008

Jugando a los cuentos de hadas



¿En qué canal era? Me preparaba minuciosamente una tortilla de jamón mientras a mis espaldas una sucesión de reputadísimas personas narraban maravillas del heredero de la corona. La cocina es mucho más entretenida, así que me conformé con reconocer algunas voces y captar frases aisladas en el caserísimo sonido de un par de huevos que se baten como toda la vida: resulta que el hijo del Borbón no sólo es un muchacho estupendo, sino que es más solidario que nadie, cooperante, campeón de la exportación del vino y el jamón, entrañable tío postizo de víctimas arrebatadas y desmenuzadas por la muerte de un familiar a manos de quienes ya saben, preocupado por la justicia social. Debe ser culto y sensible, por mucho que lo único público que yo recuerdo haber leído de sus lecturas es a Juan José Benítez. Si le gustan Ruiz Zafón o Isabel Allende, tampoco es delito por mucho que sea una plaga que confirma que la libertad está para que la gente haga cosas con ella que a ti no te gustan.

Mis presunciones eran ciertas: la serenísima televisión española, esa que en ámbitos izquierdosos es garantía de independencia y pluralidad, y que en la derechísima es objeto de uso y disfrute cuando le pone la mano encima, era quien hacía el relato de príncipes y princesas. En definitiva, los medios del estado usando el dinero que te han quitado del bolsillo tienen permitido hacer hagiografías que cuando eso que antes se llamaba el Régimen lo hacía de Bahamonde, lo llamaban de todo menos bonito. O, sobre todo, lo han dicho después, pantano mediante.

Previamente, los felices poseedores de un título habilitante que permite forrarse sin competencia y que son conocidos como teles y antenas nos han agraciado a todos con los dulces, amenos y entrañables gestos de la heroica vida del papá del Príncipe con motivo de alcanzar una edad que antes era provecta, y que hoy podemos decir que es estupenda: mi padre sólo es un poco mayor que el rey, y debo decirles que de provecto nada.

Mientras tanto, las grandes leyes del estado han puesto una multa a unos bufones por pintar al heredero y señora en cueros y de forma indecorosa: no, no estaban sentados en la taza del retrete, se dedicaban los monigotes a gozar del roce pélvico, que se supone que lo hacen con más o menos tino pero igual furia que sus súbditos. El estado puede hablar estupendamente de los coronados sin contraste, alternativa o puesta en duda de tanta bondad pero mete un puro a los que consciente o inconscientemente no se prestan al juego.

(la izquierda puede estar contenta: la mentira sigue colando)

sábado, enero 19, 2008

De pinga


¿Dónde empieza la historia - los hechos, los datos - y dónde la literatura? Norberto Fuentes dice al principio de su monumental autobiografía de Fidel Castro que puede narrarse la historia como una novela sin dejar de presentar las cosas como fueron. Como Marguerite Yourcenar. Como las Memorias de Adriano. Ya les hablé de ello. Granados debiera contribuir a esta reflexión. Lo más entretenido de la epopeya del señor Fuentes - los dos tomos es como haberse escrito A la Busca del Tiempo Perdido - es el acceso - presunto, literario, el que sea - a la intimidad del Comandante. Si han tenido cubanos o cubanas en sus vidas, sabrán que la cuestión de la pinga no es baladí. Y que las cosas, son de pinga o de puta madre:

"Una considerable cantidad de señoras puede ser consultada en relación con los siguientes datos. No me vanaglorio al hablar de cantidades ni es la proyección de una vanidad desmedida: sencillamente lo digo para que se entienda que al respecto existen testigos suficientes. Tiene de largo, en estado de reposo, o de flaccidez - como le gusta llamar a los galenos -, 3,5 pulgadas (8,89 cm) y en estado máximo de erección, 6,3 pulgadas (16,00 cm). Esto es, desde luego, con el prepucio hacia atrás y sin que ninguno de los compañeros de la escolta haga muy evidente su presencia en las cercanías, de manera que el merodeo no me distraiga. De circunferencia, también en situación de combate, tiene entre 4,9 a 5 pulgadas (12,4 a 12,70 cm), todo lo cual habla en términos muy encomiables de mis dotes masculinas, que está, como puede constatarse por encima del average - en longitud sobre todo - para la raza blanca, que es de 5,5 a 6 pulgadas (13,97 a 15,24 cm) y 1,5 pulgadas (3,81 cm) de circunferencia, y, como se ve, en mi caso no tan lejos de los compañeros negros, cuyo promedio es de 6,25 a 8 pulgadas (15,88 a 20,32 cm) de largo y 2 pulgadas (5,08 cm) de circunferencia. De hecho, y en contra de la creencia general de que es más difícil y requiere mayor esfuerzo y concentración levantar y endurecer un miembro del tamaño del mío, por la cantidad de sangre que se debe bombear al sistema, los hechos y sus estadísticas acompañantes demuestran que si bien se requiere una irrigación de mayor presión en nuestros casos, los piticos que se hallan por debajo de las tres pulgadas en estado de reposo deben acrecentar en un 250% si quieren alcanzar las 5,5 a 6 pulgadas de las dimensiones promedios, mientras que los portadores de un instrumento por encima de las tres pulgadas sólo requieren de un aumento del 160% para alcanzar el average.

Su coloración - me han dicho muchas de las jovenes que han explorado tales regiones de mi anatomía - se va oscureciendo en medida que la visión enfoca en mis entrepiernas, quizá por un efecto elevado de luces que provocaban mis abundantes vellos púbicos (en la actualidad, ya no tan abundantes) y que se enraizaban a partir de una línea que es como un ecuador delimitante del bajo vientre. En fin, que la piel de mi pinga se oscurece en relación con el resto de mi superficie, y ya es decididamente sombreada y hasta ciertamente misteriosa en la envoltura de mis pesados, abultados, cojones. Yo tengo, en efecto, la piel sonrosada y durante muchos años, incluso bien entrada la etapa revolucionaria, era pelirrojo, y muchas de mis amantes se asombraban al tomarme las manos y no sentir ninguna de las asperezas para las que evidentemente se preparaban. O que, en muchos casos, desearon, ya que realmente se trataban de las manos de un hombre que se presenta en uniforme de campaña y que, si es menester, con esas manos de músico, mata. Pero que esta región de mi cuerpo se fuera opacando casi siempre en la misma medida que iban cayendo mis pantalones, actuaba como un vector atractivo de ciertas damas."

jueves, enero 17, 2008

Narraciones del entierro


El País: editorial urgente - sin sosiego, sin reposo, al amanecer - sobre el anunciado como descabello:
"Mariano Rajoy no se ha atrevido a enfrentarse y a vencer la resistencia de los sectores que se oponían al alcalde"
Regocijo acelerado, regusto tipográfico en el relato de la escena cumbre de la tragedia. Palabras de Rajoy:
"Estoy harto de vuestros enfrentamientos. A dos meses de las elecciones esto no se puede tolerar, tenemos que arreglarlo.

El líder quiere escuchar, darles una última oportunidad para que solucionen el problema allí mismo."
¿Cuál es la de verdad?

Lo primero.
Lo segundo.

Relato de una mentira

Talla


Alberto, el hombre, ¿en qué piensa?

(escribieron su nombre en un papel y lo metieron en un congelador cuando se trajo a Rubianes, muñecos de cera con alfileres se prendieron en la noche en que puso una medalla a Jesús de Polanco, visiones de horror desfilaron por las conciencias de tantos cuando quiso el control del partido en Madrid, el infierno se abrió ante nuestros pies el día en que casó dos maricas que, encima, eran populares... pero, ¿y de lo demás?: ¿va a misa? ¿es español? ¿antiespañol? ¿habla catalán en la intimidad? ¿de qué hablaría con el PNV? ¿quitaría los cheques pisito de Chacón? ¿mandaría a la Guardia Civil a registrar pisos de abortistas? ¿qué reformas constitucionales cree necesarias?)

(¿hablamos sólo de Macbeth? ¿y quién es Lady Macbeth? certeza: Esperanza, no; duda: ¿la Botella?)

(talla: "Importancia, valor, altura moral o intelectual", dar la talla: "Tener una persona las cualidades o requisitos que se requieren")

(talla: ¿se puede mirar mal a alguien que quiere ser presidente del gobierno? Existe uno que, al menos, no lo oculta. Su verdadera dimensión consistiría en retar el liderazgo de un líder débil y ganar uno por uno los votos que le dieran el título de rey del potlasch)

(talla: "El alcalde tiene dos vías: hacerse el mártir o demostrar que está a las duras y a las maduras en el partido", versión prensa italiana en campaña contra Prisa)

(Valle Inclán: ¡cráneo previlegiado!)

miércoles, enero 16, 2008

La nación vaporizada


"Una empresa más por llenar un vacío de los símbolos nacionales que no llega a buen puerto"


Conclusión editorializante, entre melancólica y resignada, del informador de Pedrojosé-online. El himno ya es vaporware. ¿Algún inteligente que haga de la necesidad virtud? Entiendan lo que digo: convertir el vacío en la razón de ser.

martes, enero 15, 2008

Alianza de Civilizaciones


De club de conferencias, a trabajo de artistas: una vez me recomendaron que, siempre que pudiera, me ganara la vida hablando. ¿Dialogando? Con gastos pagados, mucho mejor.

(La Reina Noor de Jordania en Madrid ha anunciado hoy en Madrid la creación de un fondo de 100 millones de dólares para subvencionar producciones audiovisuales que promuevan la integración cultural, según ha dicho ella misma durante el I Foro de Alianza de Civilizaciones, que se celebra en la capital de España)

("todos somos hermanos")

("Me rompe el corazón que haya niños que quizá interiorizan información equivoca que aparece en las películas o en los medios de comunicación sobre la gente que es diferente y que reza diferente")

Gallardón, resbalón

"Mariano Rajoy ha comunicado en una reunión al alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, que no irá en las listas del Partido Popular por Madrid en las elecciones generales del próximo 9 de marzo."

Si los candidatos fueran votados por las bases de los partidos y no designados a dedo, Rajoy no se hubiera comido un marrón. Puede que Gallardón, sí. O no. Pero Mariano también fue elegido a dedo.

(será de especial interés comprobar en qué argumento se basan los antigallardonistas para respirar hondo: la mala idea, el reglamento, su incapacidad o qué. Lo de reclamar listas abiertas para la ley electoral pero no para el (los) partido(s) es otra cosa. Luego todo el mundo se llena la boca en estado admirativo al mirar las primarias americanas para decir que, después de lo que se ha de pasar, gana un presidente tonto)

(detalle: Mariano firma como presidente nacional. Qué poco cuidamos la estética)

(en LD siempre hacen editoriales en vez de noticias: "Tras el fichaje de Manuel Pizarro, el PP sigue sembrando sentido común". En fin, no deberían sorprender las críticas)

Pizarro anticatalán


No lo sé, no hablo con él en la intimidad. Pero me imagino que los accionistas catalanes de Endesa deben estar encantados con la plusvalía conseguida comparada con la ofrecida por la catalanísima Gas Natural.

domingo, enero 13, 2008

Contraofensiva


Irene, atentísima, no deja escapar lo esencial. No es su mano, es su intención, que esta vez recoge una pieza de texto, como se decía antes, como se dice en la izquierda, necesaria:
Recupera aquello que usurpan los que se dan a sí mismos el título de izquierda: la Ilustración, el progreso, las libertades.
Algo así les decía yo, mucho peor, en el párrafo seis del solemne texto con el que les quise adoctrinar esta mañana. El artículo - el otro - de Alfonso Lazo. Un placer.

The land of the free al norte de Marruecos



La pizpireta señora Aguirre, pregonera liberal pero que bien sigue esa vieja tradición cristiana de no saber en su mano derecha lo que hace su mano izquierda, insiste en sus monólogos ideológicos sobre España y los españoles en la idea de la nación de hombres libres. Es una canción preciosa, no creo que a nadie le disguste la idea de ser libre. Ni de tener una nación de hombres (¿mujeres?) libres.

En torno a la derecha española, se viene reiterando este discurso - perfectamente legítimo, qué duda cabe - de precisar el significado de España como sinónimo de libertad, especialmente como contraposición a los nacionalismos (presuponiendo que los anteriores no lo son) que serían los que están negando la libertad, trabajando esforzadamente por la recreación de patrias milenarias de dudosa legitimidad histórica y jurídica. Este es un discurso que, como el de los contrincantes, esconde una serie de verdades hilvanadas con deformaciones, interpretaciones particulares y sardinas que se arriman a ascuas de diverso pelaje.

En ese intento de españolear la libertad, tanto Aguirre como otros propagandistas (pagar películas de cine sobre héroes de mayo - ¿cuántos héroes de mayo hay por el mundo? - mientras se niega el valor de las subvenciones, o emplear los micrófonos como estrategias de movilización de mentes dormidas, es propaganda), recurren a la revitalización de una vieja iconografía que en el pasado se tuvo por heroica, pero que personalmente creo que llevaba más años sometida a la curiosidad cultural (leer a Galdós es una cosa en verdad muy recomendable) que a recreaciones por la causa. De otra manera: que Agustina de Aragón es una cosa envejecida y para la anécdota de cómics de posguerra y Rafael Casanova resulta una obligación moral de homenaje.

Sometidos, apabullados, cansados, moralmente heridos, indignados a ratos por la propaganda y acción nacionalista más obscena y por momentos bochornosa, aturdidos por treinta años de acción/reacción, por una mezcla de sentimientos de culpabilidad, reparación, restitución y a ratos venganza, la cuestión intelectual de si no se está sustituyendo un nacionalismo que se consideraba agotado por un nacionalismo alternativo que brilla igualmente en casi todo lo peor del primero, ha carecido de una respuesta política solvente. Solvente porque el debate sigue abierto, como se puede comprobar por el interés que le dedica este enano oculto en sus conciencias que es Berlin Smith y por el de ustedes que se dejan enredar por el enano.

¿Es por falta de categoría intelectual o - también - porque en el fondo de sus conciencias no son otra cosa que nacionalistas vetustos cuya única diferencia con los acusados de serlo es la falta de color que la oficialidad deja al nacionalismo? Como dirían Duran i Lleida y en cierta forma Rubert de Ventós, poder dejar de ser nacionalista al ver que la realidad no lo hace necesario. El caso es que a la hora de pasar la prueba de la libertad, parece que España importa más que la libertad, que los principios liberales de los que se presume en los discursos y que la Corona, la bandera, el himno nacional, los héroes del 2 mayo, la Pepa y Cádiz, son todos requisitos necesarios para España y la libertad. Cuando son los conservadores sin tapujos los que hablan (es decir, no tanto los autoproclamados liberales) suele mezclarse la cuestión con determinados valores religiosos o, lo que me parece peor, asociar España a categorías morales católicas. Patria y religión, como bien saben irlandeses, israelíes, catalanes, vascos y españoles con edad suficiente para recordar el ángelus en radio nacional son cosas que se mezclan con demasiada soltura.

Mariano y su partido: paladines contra muchas cosas que lo merecen con otras que no lo merecen demasiado mezcladas en un cóctel de sabor insatisfactorio, muchas veces repulsivo. Bien por su propia condición, bien por esa falta de verdadero desarrollo ideológico de los ingredientes que mezclan, tiran día a día por la borda la única posibilidad que tienen de ser mayoría y de "salvar" "su" España: si importasen más los hombres libres y la sociedad civil que España, podríamos al menos ver discursos y propaganda electoral que nos explicaran que no se es de izquierdas, algo de tanto prestigio, precisamente porque se cree en la libertad y en la justicia, que no es la izquierda la que favorece a los pobres y que las políticas socialdemócratas no hacen menos pobres ni gente más libre ni más culta. Veríamos discursos y propagandas que asumen que la identidad se debe ejercer con libertad y que no hay estado - ¿no eramos liberales Esperanza? - que deba imponer la obligación de conocer un idioma, o que no hay principio moral que pueda obligar a nadie a sentirse español y, por tanto, ser obligado a acudir a una selección nacional. O a adorar muertos pasados a los que se les debe pleitesía. Cosas, ya sé que lo dirán, que pueden repetirse con los matices necesarios, del lehendakari que nos coja confesados.

La verdadera estrategia brillante ante la falta de un himno y una banderas queridas y amadas por los ciudadanos no es o no era tener que plantar una mucho más grande en la plaza de Colón, ni emplear al extraño grupo de integrantes del Comité Olímpico Español para inventarse lo que la tradición no ha logrado asentar por sí misma. No es tampoco asumir con naturalidad que, efectivamente, banderas grandes e himnos heroicos los tienen todos los países y no pasa nada, que así es, era aprovechar la oportunidad para defender un estado carente de nación, para ser verdaderamente innovadores y desarrollar una propuesta política para superar la identidad como principio cuasijurídico que impregna todos los conceptos: lavarse de patria para ser ciudadanos. Seguramente, lo que la población en general espera para no tener que tomar partido entre patrias.

¿Lavarse de patria y quedarse limpio es posible? ¿Puede lavarse uno y esperar que lo hagan los demás? Quién sabe. Probablemente no hay nada que lave más blanco pero es, si se quiere llamar así, la única opción moralmente válida para los campeones de la libertad y el estado limitado. Como se puede ver, en cuanto pintan bastos, que es casi siempre, Mariano se pone una bandera, pide una letra musical que mencione a la Corona y promete un ministerio de familias y bienestar. Para ese viaje no se necesitaba alforjas.


(mis habituales me dejaran algunas notas sobre mi ingenuidad y utopismo supuestamente genético, ya lo sé, pero ahora no tengo ganas de rebatirlo: quédense con que las ideas, las buenas y las malas, se difunden y consolidan con los buenos liderazgos)


(habrá quien diga que liderar una mala idea y alcanzar el objetivo es un mal liderazgo: sí, claro, pero no está al alcance de cualquiera liderar una mala idea, como Mariano y José Luis demuestran día a día)

Sinvergüenzas (pero si ya somos dos)


Se me quejaba Luis del comienzo de (mi) campaña electoral contraria a. Servidor concluía el otro día que el envoltorio unipersonal que el señor primer ministro de la cosa española se aplicaba en nombre de la patria tenía el carácter que Samuel Johnson dejó a la posteridad para todo el que lo quiera recordar: sinvergonzonería. No es una particularidad del vecino nativo de León: uno piensa que es una enfermedad del poder. Y el hecho de que no haya terminado sus primeros cuatro años y ya esté en ello, un síntoma. Pues otros tardaron más.

Tom Burns Marañón, que sabe mucho más inglés que yo, que ha ido a Oxford, y que es pariente de un filósofo bien admirado por mi querido Luis, lo dice hoy también en ese periódico opositor, tantas veces vocinglero: "Denominar antipatriótico a determinados juicios muestra tics dominantes y es mobbing puro y duro."

viernes, enero 11, 2008

Efectivamente, se podía caer más bajo


Lo del himno va a ser apasionante: el parado manchego autocalificado de perdedor construyendo la imagen (de la patria) española. En las calles de los territorios antiespañoles se están partiendo el pecho. Los futbolistas se supone que tendrán que cantar el día 6 esta cosita... y ¿si no quieren? ¿y si tienen, como mínimo, objeción intelectual estética? ¿nadie caerá en que los deportistas están siendo utilizados en una causa de la misma manera que se acusa a los que persiguen a los deportistas catalanes para que se manifiesten sobre cuál es su selección? ¿serán llamados antiespañoles los que no quieran cantarlo?

Permanezcan atentos: ni José Luis ni Mariano se han manifestado (sospecho que se están acordando de la madre que parió al del COE y al manchego por sacarles, ahora, este lío). Los comentarios de Carod van a ser jugosos, como la portada de Gara. Las preguntas a Pujol y Artur van a dar caras para un documental. La de Montilla tiene que ser gozosa. Arzalluz saldrá del retiro. El lehendakari hará un circunloquio educadísimo para terminar hablando del pueblo vasco y el respeto con que miran a España desde bien lejos. Esto va a ser una auténtica juerga.

P.D.: ¿le harán la pregunta correcta a Raúl? ¿Quiere, si le llaman, ir a otro mundial a perder con el himno de un perdedor? Esto se sale de madre y va a terminar en TBO.

P.D.2: El vídeo de El País es pa meá y no echar gota.

En la prensa de papel (este atraso me lo dan en un avión) una llamada a la compra de eso que antes solía ser tan sano como comprar libros (hoy día depende de cuál). La cita es brillante: "Si el presente trata de juzgar al pasado, perderá el futuro". El autor, un auténtico creador de marca personal, que se dice ahora: Winston Churchill.

El lema del anuncio es: ¿se lo imagina diciendo algo así...? Y el martillo de Lord Chamberlain aparece acompañado de una foto de... Mariano Rajoy.

Se consumó la payasada


¿Hay que añadir algo, aparte de lo sospechoso de las palabras azules, el mar, y la cursilada del corazón unificado? Uno pensaba que iba a ser horrible, pero ¿tanto?:

¡Viva España!
Cantemos todos juntos
con distinta voz
y un solo corazón

¡Viva España!
desde los verdes valles
al inmenso mar,
un himno de hermandad

Ama a la Patria
pues sabe abrazar,
bajo su cielo azul,
pueblos en libertad

Gloria a los hijos
que a la Historia dan
justicia y grandeza
democracia y paz


(¿quiénes son los hijos de qué historia, con hache enorme? El nacionalismo oficial se tiene que frotar las manos: entre esta cosa y Els Segadors, qué quieren que les diga)

jueves, enero 10, 2008

José Luis llega al punto inevitable


La virtud esencial de los clásicos consiste en su vigencia. La patria, ya se sabe, es el último refugio de los sinverguenzas. Sin ponerse dramáticos, podemos decir que es el último recurso cuando te han pillado con el carrito del helado. En el caso de los políticos que, como todo el mundo sabe, son los más patriotas de todos, es el síntoma inherente a la falta de argumentos ante la inevitabilidad de los hechos: no de cualquier hecho, sino de los hechos que tienen que ver con tu propio desempeño.

José Luis alzó ayer su copa en honor de Samuel Johnson (el clásico, ya saben):
"«Esto es», afirmó, «lo menos patriótico que conozco». Y más tarde, volvió sobre la misma idea reclamando al menos «unas gotas de patriotismo» a los que hablan en «términos insólitos» de la marcha económica."
Su antecesor ideológico tardó unos diez años - puede que más - en justificar el abuso de poder y la calamidad en su incuestionable compromiso con su país. Este caballero no ha tardado cuatro años.



(Oh, el tipo habló ayer de expectativas. Aparte de la capacidad de todo buen entendedor de castellano de vislumbrar lo que la palabra expectativas representa, uno se pregunta si Taguas o Sebastián le han explicado lo de las expectativas de los agentes en la anticipación de los precios futuros. Y le habrán contado que él, como gobernante, no puede decir que irán a peor: inevitablemente, todos pensaremos que irán mucho peor que el peor que se ha insinuado. El susto, la debacle, viene cuando dices que mejorarán una semana sí y otra también y luego no mejoran. Como cuando avisas de que llega el tren y no llega o que vamos a estar mejor y te hunden una terminal de aeropuerto. El pollo hablaba ayer frente una colección de aves de rapiña de rara majestuosidad y experiencia en la detección y captura de presas desvalidas: uno puede hablar para ellos o para el público, que es el que vota. O puede intentar hacerlo para los dos, por aquello de la respetabilidad. Si piensa por un segundo que los mismos que le hacen la pelota para que les arregle este o aquél entuerto que la ausencia de capitalismo real obliga a hacer le respetan lo más mínimo, lo lleva claro. Lo debe saber, pero qué otra le queda)

Sorpresa! (antes solía poner "actualización"): parece ser que miente. Un sudor frío, dicen, parece que recorre la espalda de los fontaneros de Moncloa. En un clásico del capitalismo de mentira, el gobierno se prepara para que el estado financie lo que la banca no hará. Vamos que algún Colonial se va a la suspensión de pagos en cualquier momento

miércoles, enero 09, 2008

De la izquierda caviar a la izquierda maternal


Pilar Rahola es un personaje mucho más interesante desde que dejó la política: seguramente nos mostró lo peor de sí misma cuando era representante del pueblo. Suele resultar espantosa en sus debates en los programas de entretenimiento grosero. Pero luego es una brillante escritora que resulta no ser sectaria y tener una línea personal contra viento y marea. Quizá psicológicamente lo único que es es una contestataria. Asumiendo una bandera izquierdista se pega por Israel o disecciona las paridas del izquierdismo ¿oficial? ¿realmente existente? Como son paridas, ventanas reaccionarias como ésta suelen coincidir en muchas miradas.

Pues ahí tienen una de las críticas mejor escritas a la nadería de este gobierno, intelectual y de obra, que en ambas dimensiones se da:
A diferencia de Latinoamérica, donde la izquierda carnívora - la que devora los conceptos democráticos sin pudor y se alía con dictadores y guerrillas delictivas- apenas existe, nuestro debate no es entre la convicción democrática o no de la izquierda. Aquí todos son - salvo alguna tontería de IU- de la izquierda vegetariana. Pero empieza a vislumbrarse un curioso fenómeno que, a falta de mejor definición, me atrevo a bautizar como el de la izquierda materna. Esa nueva y esforzada izquierda concibe el poder como si fuera una ONG, entiende al ciudadano como un visitador de los comedores sociales y no distribuye el dinero desde una perspectiva de proyectos consolidados sino como si fuera una obra de caridad.
Ya sabíamos que la brillantez no era el rasgo que definía a Chacón. Pero miren qué bien demostrado:
Y así, a pesar de que nadie sabe ya si la derecha y la izquierda, en lo fundamental - en la vida cotidiana de la gente- se diferencian seriamente, es de prever que la izquierda usará esa bandera de forma recurrente. Ese fue, por ejemplo, el único discurso de Carme Chacón en el 59 segons de TVE-2, donde coincidimos, la permanente demonización de una derecha que, tanto en su versión catalana (CiU), como en su versión española (PP), tenía la culpa de los males del mundo. Y cuando le recordamos alguna responsabilidad propia - algún pequeño error socialista, nada, sólo para molestar-, nos alentaba el miedo. ¡Cuidado, que puede venir el Papus! Huelga decir que todo ello me parece de una gran inmadurez, que servidora no teme a ningún partido democrático y si no vota a alguno es sencillamente porque no le gusta.
Creo que tengo que elaborar mi teoría del aburrimiento masivo como gran protagonista emergente de nuestra política presente y futura.

martes, enero 08, 2008

Los amigos de la sociedad abierta... culpables anticanon


¿Darle tres cuartos al pregonero merece la pena? Personalmente detesto el uso, abuso y masificación del empleo de la abreviatura progre como descalificación genérica, intelectual por el hecho de serla y, casi por encima de todas las demás, estilística: lo sobado es de modo natural manido y lo manido diluye lo que tenga de valor. Pero hoy Vicente Molina Foix se ha ganado el segundo premio internacional al tonto contemporáneo. Por supuesto, no ha ganado el primero por tonto.

Se echaba de menos una contraofensiva cultural en el ex diario independiente de la mañana después de su prudencia periodística en poner pringando el cánon y esconder la mano. No ha llegado al editorial combativo, ni siquiera al editoral como es debido, pero en las noticias y tribunas se ha escapado un sesgo que, en términos de la terminología periodístico/progresista imperante llamaríamos de denuncia. Ya se sabe el mal uso de esta palabra: ahora una queja es una denuncia. La atribución de una injusticia o el simple malestar es una denuncia. Una opinión bienpensante es, finalmente, una denuncia. Eso sí, que no me acusen de parcial: si se han publicado argumentos anticanon, alguien debería defenderlos. Pero no han sido Teddy Bautista y sus esbirros, ni tan siquiera Ramoncín, el ex punk acaramelado que se aterroriza al ver lo que mala educación puede hacer: Sid Vicious se debe remover en su tumba partido de la risa.

La gesta es del Sr. Molina, intelectual orgánico y afín: toda la gravísima culpa del movimiento anticanon la tienen los amigos de la sociedad abierta (literal) y el posfranquismo (se supone que ideológico) escondido en el partido popular, por supuesto y, sujétense, en la reedición de la fatídica pinza Anguita/Aznar, "de infausto recuerdo". Parece olvidarse que la pinza no tenía otra causa que la denuncia del crimen del estado y la corrupción organizada desde el partido del poder para financiarse ilegalmente. Un detalle tontísimo y de infausto recuerdo, claro.

Para Molina estar en contra del cánon tiene también algo de colonialismo cultural (sic): no se entiende por qué no es un escándalo que varios de sus mejores beneficiarios lo son por la imitación o absorción de culturas ajenas, como el autor de aquella letra en el que moría el último punk en Putney Bridge o él mismo y su pasión por Shakespeare y el inglés, o por qué el canon va a disminuir el consumo de músicas y cines lejanos: será el mismo de antes, pero se les pagará a pesar de que no se quiere consumir. Artistas internacionales de éxito subvencionando a artistas locales sin éxito o que no da para un yate. Si le pones el apellido excepción cultural y lo rodeas de palabras como dignidad, patrimonio etc., etc. resulta que es la defensa del progreso.

A partir de ahí, todo son las falsedades agotadoras divulgadas por los mantenedores de esta renta a costa de los demás, de la reedición del privilegio indiscriminado y esa leyenda zafia de que la cultura no sería posible sin que, seguramente, CEDRO le pague a él por el cánon de las fotocopiadoras, dinero que recibe que nunca ha hecho público y que nadie conoce pero alguno será, y todo eso a pesar de que debe haber cientos de miles de individuos fotocopiando novelas de este señor: yo veo cada día uno. Sólo tienen que leerlo: lo peor de todo esto es que habrá quien le crea. Pero lo más risible de todo, viniendo de un campeón de la defensa de la subvención (porque si no, no habría ópera, por ejemplo), que no es otra cosa que la intervención pública, es la hermosa defensa de las entidades de gestión:
Tanto la SGAE como CEDRO, por citar dos de los principales entes de gestión de derechos, tienen una larga, limpia y perfectamente fiscalizable trayectoria, al servicio de unos socios recibidos en su seno sin traba y a los que se encargan de servir, representar y asesorar, en un organismo que tiene algo de sindicato libre.
Toma del frasco carrasco. Vistos los antecedentes de la asesoría jurídica de Teddy cabe preguntarse por qué este señor nos sorprenderá en cuanto haya ocasión en este mismo periódico y en las empresas del grupo propietario que también (¿tan bien?) le da de vivir (su mérito) con una defensa encarnizada de la libertad de expresión. Y la de los creadores, por supuesto. La misma que en este momento niega, no se sabe si por tontería o por desconocimiento: SGAE perseguidora de opiniones, de la libertad individual y de la libertad de los creadores: si no deseas que SGAE gestione tus derechos, ahí están ellos; si los creadores han decidido que no quieren cobrar ni cánones, ahí está la SGAE; si reproduces lo que otros dicen contra ellos, vas a los tribunales. Sólo faltaba decir que si estás en contra del cánon eres un fascista.

(Léanselo y manden cartas al director, que yo soy muy vago)


Breve post-scriptum: conviene precisar qué significa tonto, porque puede que un ejército de bienpensantes (si fueran abogados de la SGAE o de Molina, esto sería un salto a la fama) me acuse de ampararme en internet - qué canalla la red - y en mi nombre supuesto (¿quién dice que es supuesto?) para insultar. Honor, cultura castellana con canon. RAE dice que tonto es, entre otras cosas, "Falto o escaso de entendimiento o razón", lo que es todo el artículo de marras, algo propio de quien no entiende nada de lo que es el canon, un impuesto o la cultura de verdad (paradójico). Pero más propiamente Espasa-Calpe, un templo cultural, lo considera un "acto o dicho carente de lógica o de sentido común": hacer pagar a todo el mundo por lo que hacen unos y no otros y considerar que 0,60 (veinte durazos de los de antes, más que el coste de fabricación) es poca cosa a sacarle a un CD, carece de sentido común (si sabemos lo que es tal cosa, ¿pero a que agrede a la lógica?) Tan torpe que se olvida del mejor argumento: dentro de poco no usaremos cedés para reproducir música. Claro, que nos lo cobran en todo lo demás.

domingo, enero 06, 2008

Naciones en disolvente de redes


Regalo de Reyes para Mapuche:

El nuevo experimento de David de Ugarte, que seguro que nos dará mucho que hablar. Sobre esto hemos discutido un poco y mi estimado amigo Albert suele pelearse conmigo por el acento en la jerarquía, esa cosa que las redes reducen, disuelven y deconstruyen. Como, en realidad, estamos siempre más cerca en lo que pensamos que en lo que no pensamos, yo me divierto en explotar las debilidades de cada enfoque seguramente casi tanto o menos (usted, Mapuche, siempre más) que él: el problema de ver las redes como puros elementos desjerarquizadores es que no resuelven el problema del poder duro. Ese que yo sospecho que, salvo mutación feminizante y tras la eliminación de la propensión al fraude y la mentira que los prometdores resultados de un análisis objetivo de costes y beneficios que todo individuo efectúa varias veces al día, supervivirá mientras llega el hombre nuevo que la biología evolutiva promete. Preguntas al Dr. Mapuche.

Por otro lado, extraigo esta interesante cita que De Ugarte para empezar a repartir tomates por todos lados:
En países como España, Nigeria o Marruecos donde el estado no ha podido imponer de una forma clara y homogénea estos mitos -es decir, donde el estado ha fracasado al menos parcialmente como proyecto nacional- se dan fragmentados en la forma de nacionalismos alternativos y un cierto protagonismo de las identidades y pertenencias pre-modernas como la familia, la cuadrilla, la religión o el linaje. Y precisamente por eso en estos países la Cultura es parte central del debate más que en ningún otro lado.

Pero vayan a Francia donde la homogeneidad identitaria hace aguas por la presión migratoria. O a Brasil, Argentina, México, Cuba o Bielorrusia, donde el proyecto moderno, en su dimensión nacional vive con pujanza. En estos países hasta la alteridad, hasta el presunto antagonismo al estado nacional lo es por el estado, a cuyos gobiernos o dirección social se les reprocha, en todo caso, su falta de sentido nacional.

Esta subsunción del conflicto en el estado de cultura, en la identidad que nos es dada desde el propio estado nacional, es especialmente clara en los debates sobre la propia cultura y en especial sobre sus formas de jurídicas de propiedad. No es casualidad si la Unión Europea se resiste con fiereza a abrir sus mercados a Estados Unidos en todo aquello que considera digno ser considerado excepción cultural, del cine al camenbert. No es casualidad si los derechos de autor han sido elevados a la categoría de derecho humano universal y se han impuesto, por primera vez desde el Antiguo Régimen, verdaderos sistemas privados de imposición (como el canon sobre los CDs o el ADSL) para proteger a unos pocos centenares de privilegiados autores.
Por cierto, acaban de matar un Mapuche en una manifestación en Santiago reclmando las tierras de sus antepasados. Cultura ancestral que se defiende en cultura "moderna". ¿Serán lo uno o lo otro? Bueno, al final, lo que uno más o menos pretende decir es que descompongamos la nación española para descomponer luego la catalana, la vasca y hasta la andaluza con su pescado frito. Lo de la nación "Europa" no me convence nada por razones diversas generalmente muy francesas. Las culturas como tótems me tocan verdaderamente el pie.

Que seguro que me dejo algo que matizar y precisar, pero dará igual, nos saldrán en las cajitas 80 ó 90 mensajes hasta que se vuelva cansino seguir bajando la barra de navegación.

viernes, enero 04, 2008

En justicia...


Me pedía Sartine la otra mañana que diera mi relación de mejores post del año. Le dije que no tengo ni idea. Otro meme más no, por favor. Pero mi fiel seguidor y pepito grillo habitual, el señor del nombre impronunciable (para mi generación, claro está), Hairanakh, ha redactado un brillante miniensayo poniendo en evidencia lo que de verdad es el sistema electoral español. Con excelentes referencias a otros blogs e ilustres comentaristas. Así que si no es el mejor del año, merece ser leído y con eso basta.

Hay un cierto discurso sobre la inanidad de los blogs, la irresponsabilidad de sus escritores y su difícil fiabilidad. No han entendido nada: no son los blogs, es la conversación. Y, sobre todo, no cambia que la selección de fuentes es la clave. Igual que en la era del papel. Sólo que los que no existíamos (nosotros, los que leíamos) ni nos hablábamos, no teníamos oportunidad de hacerlo: de existir, contrastar, ampliar y desnudar a los dioses de la opinión pública. Yo no veo a los llamados medios de comunicación, con todos sus famosos escritores, en la vena y la capacidad de hacerlo.

Pues eso.

P.D.: Si estamos así, no me queda menos que agradecer a Luis Gómez (por cierto, apoyénle) y a Irene Sánchez ese rato de su autoengaño que me llena de orgullo y que les conduce a declarar sendos posts míos como mejores del año. No les he pagado, pero les debo una paella.

El final de los aficionados



Suele ocurrir y hoy ocurre que las primeras planas de los periódicos reflejan de modo divergente la realidad (¿qué será la realidad?) motivados claramente por su lectura (¿sus intereses?) de los hechos: la aguerrida prensa opositora saluda los datos de la economía que duda con titulares inconfundibles. "La crisis le estalla al Gobierno con 106.000 parados más y el IPC en máximos de 12 años", dicen los defensores de la Monarquía, los presuntamente razonables no dicen menos: "El paro y la inflación tumban el optimismo económico del gobierno".

La prensa afín, desde la teóricamente afín ("La economía acosa a los socialistas a sólo dos meses de las elecciones" ), hasta la de sugerido compadreo, ("Grietas en la economía española"), siempre con menos riqueza tipográfica, hacen menos pupa. Eso que se daba en llamar la periferia, puede pasar de puntillas (la proximidad a Montilla hace un editorial insípido y defensivo en El Periodico) o si se está más apegado a la doble oposición (a Madrid i a Barcelona) la cosa se pone más explosiva: "Més atur i preus disparats". En la Vizcaya conservadora dan datos y poco más (casi parece hasta periodismo), y en la Vizcaya igual de conservadora pero constructora de país, ponen la lectura que demuestra la superioridad intrínseca de la raza elegida: "El paro baja en la CAV un 2,13% mientras sube un 5,2% en el Estado". El Lehendakari, un titán.

Mirando todo a la vez, el resultado hace un diagnóstico que se debe parecer a la realidad: los vascos a su bola - aunque si el paro sube en el estado, terminará subiendo en todo el estado: es lo que tiene que Eroski ponga punto-es en su dominio de internet - y el final de la fiesta: desde Moisés sabemos que los años de vacas gordas vienen seguidos de años de vacas flacas y no hay keynesiano que haya terminado con el ciclo, así que el crecimiento ininterrumpido durante tantos años en plan tigre de aguas orientales termina por acabarse, incluso en la asia más lejana: veremos qué le pasa a los chinos después de los juegos.

Culpable o no culpable (en realidad, si tiene buena o mala suerte, los gobiernos occidentales son bastante apañados en no meter la pata mucho y poco más pueden hacer de magia), lo interesante para José Luis y sus huestes, sobre todo las más cercanas, es que se ha terminado el tiempo de ese juego llamado "cuán moderno y avanzado que soy y cuán modernos os vamos a hacer" y van a tener que gobernar. Es decir, la trayectoria de convertir toda la agenda política en una versión elegante de las fiestas de un pueblo (chupinazo y encierro, si hay heridos por asta de toro sólo es culpa de los que corren), me temo que deja de servir. El juego del tío bien situado que ahora reparte unos cheques por allí y otros por allá y que regala sopa boba se va a poner complejo.

Así que, con todo lo que moralmente tiene de bueno y hasta de necesario, el entretenimiento de los derechos homosexuales, los antepasados violentados, el tabaco y las copas, lo simpáticos que son los turcos y qué malas las hamburguesas, pueden ser temas de importancia ínfima si el crecimiento baja del 2%, los contratos temporales no se renuevan y los recién llegados tienen que optar por buscarse la vida en vez de ir al tajo: la gente se suele cabrear bastante y suele pedir dinero y que el estado le arregle el estropicio. A otros les puede dar por asaltar Morenos.

Lo único bueno que tenemos es que ya lleva cuatro años y de las torpezas se aprende. Lo malo es que el buen rollo también se acaba. Por cierto, ¿qué fué de aquello de la productividad y el patrón de crecimiento? Vaya, las tardes que no has tenido tiempo. Llámate a Miguel, que te lo vuelva a contar a ver si fue que no lo entendiste. Cuando baja el nivel del agua, suele aparecer la mierda del fondo. Quizá sea preciso decir la mierda de fondo.

miércoles, enero 02, 2008

Goyesca



Esperanza. ¿Es incoherente que se ponga a recrear y elaborar mitos? En el entorno en que vivimos en el que lo épico es Zumalacárregui y no Espartero (o, en su defecto, los hiperbólicos cojones de su caballo), en el que defender novelas de caballerías es un acto de justicia y verdad para unos y no para los otros, ¿quién culpa a la heroica defensora del bastión de España?

Uno piensa que saber si fue el pueblo español el que se levantó frente al francés, no fuera por si en realidad fue el populacho, es cosa de apasionante materia de investigación histórica. Comprender la cosmovisión del mundo de gente que vivía antes que yo siempre me ha parecido un ejercicio de salud intelectual de lo más gozoso. No es difícil caer en la tentación de que las cosas del pasado se traigan al presente en forma de razón.

Las palabras y las ideas suelen cambiar de perspectiva. No suele significar nación, soberanía y monarquía en unos tiempos lo mismo que en otros. Como liberal no significó liberal, ya que estamos, hasta después del famoso acontecimiento de la ciudad que llaman tacita de plata. Y sigue mutando.

Supongo que todas estas cosas llevan a la Sra. Aguirre a recitar con apasionamiento esas proclamas que citan por ahí del levantamiento de una nación de hombre libres. Todo un antes y un después. 1.808. Alguien podría recordarle como el pueblo libre saludó la pugna por la soberanía nacional con el célebre vivan las caenas unos años más tarde. Es lo bueno que tiene mirar la historia: que sirve tanto para inventar mitos como para deshacerlos.

Creo yo que Esperanza se podría haber puesto más original y divertida en su curso de historia: por ejemplo, que la defensa de la independencia española se inició en Guipúzcoa nada menos que por un vecino de Mondragón, territorio pasto hoy de ANV. Y que tuvo su centro a pocos kilómetros, en Oñate, al ladito de Aránzazu: el corazoncito del sentimiento vasco donde los haya. O que Zumalacárregui se hizo oficial del ejército español (o del Rey, vete a saber) en esa misma pelea contra franceses y afrancesados. Como divertido es que Agustina de Aragón fuera de Reus y de segundo apellido Doménech.


___________________________________________________________
P.D.: Si es que la historia encuentra argumentos para todo. Compartir una idea del pasado da confort a la vida cotidiana. No es el caso de Carpetovetonia. La pregunta es cómo se construye el consenso, si es que es posible. Claro, lo reciente suele ser más peliagudo, como saber cuánto era de buena la ETA de 1973. Algunos han llegado a decir que hay que inventarse algún mito fundacional de la España moderna para hacer de pegamento en el siglo XXI. Lo de 1812 me da que no genera espumas de pasión. Osadas afirmaciones como esas llevan a dar por buenas las invenciones de Sabino como contrapunto: será cuento, pero como cuento me dicen que tengo que tener, lo de Jaun Zuría y Bizkaia por su independencia es un relato de lo más bonito. Mi ingenuidad perpetua reside en hacerse la pregunta obvia, que de puro obvia, no hay quien la haga: ¿De verdad queremos vivir juntos? Antes de responderse, asuma que lo de vivir juntos entraña, generalmente, ciertas molestias. Las ventajas ya las tiene y no se ven. La cosa es si la soledad, que suprime las molestias, tiene ventajas menos interesantes y otro tipo de molestias.

P.D.2: la otra pregunta es si en una era post-Rajoy, que llegará, esta Esperanza tiene condiciones para que sus relatos épicos sean tomados en serio más allá de Madrid. Condiciones significa "hacer creer". O si el malvado Gallardón y su pasteleo traicionero tiene más opciones de no se sabe qué, porque algún día tendrá que decir lo que piensa de verdad... y a lo mejor no tiene un cuento mejor. Los de José Luis se apuntan a todo, no se preocupen, que son plurales.


Esta curiosa y hermosa foto es del señor Marcelo Montecino