sábado, enero 06, 2007

¿Se lee en La Vanguardia a Berlin Smith?


Eso cree nuestro Mapuche disidente. Qué quieren que les diga: resulta muy estimulante y regocijante la posibilidad. ¿Quedaría como un muy entretenido colofón de la manta de folios que les he soltado sobre El Ala Oeste? ¿O el público pide más? ¿Pide más parábolas teatrales, quiere saber donde está Leo McGarry en este entramado ante la mayoría de edad, que no de cordura, del Zapatero prodigioso? Veremos, que dice el clásico que dijo un ciego y se quedó sin ver.

El Mapuche advertía ayer, y conste que no le pago por decir estas cosas (que el eterno de internet le condene a ser recordadas sus palabras por los siglos de los siglos) que el Sr. Juliana, a la sazón comentarista político del susodicho diario de tanta tradición catalana (ya sabemos que catalanista no, aunque ahora conserve un limpio castellano junto a la redacción "Catalunya" para referirse a "Cataluña", cosas de la corrección política), dedicaba unas palabras que, servidor, que también quedo atrapado en la máquina del tiempo de las cachés de Google y de mis vigilantes enemigos, he calificado a lo Racionero de "intercontextualización".

En realidad, ni el Mapuche ni yo tenemos pruebas de nada, sólo ganas de meter bulla ante lo que parece una inspiración un tanto próxima. O sea, que de plagio, nada, coincidencia en los temas y en algunas valoraciones, puede. Y eso llena de orgullo al sobrevenir la certeza de que podría escribirse públicamente en La Vanguardia y cobrar por ello. Mandaré una carta al Conde de Godó para preguntarle qué hay de lo mío.

Al grano. Decía el mapuche Albert:

PS: su post ha salido publicado hoy (5 de Enero) en La Vanguardia, sección política en la columna de E. Juliana -Los gobernantes deben sufrir (sin demora)- cito de memoria. Es una copia empobrecida de su post. E. Julina ya lo suele hacer, con Bauman, Gaziel y ahora...Berlín.

PSS: Sr. Juliana, tiene usted buen gusto.
Nada como seguir en este caso una máxima que siempre les repito: juzguen por sí mismos, sean protestantes y léanse sólos la biblia a salvo de intérpretes interesados como lo puede ser un servidor. Ah, pero para hacer la lectura valiosa, ANTES deben leerse el post de Berlin Smith causa potencial del paralelismo. Juliana, Smith y Plutarco: tenemos un futuro.

He aquí la pieza de la discordia (que publico sin derechos para ello pero que he pagado ¿eh?, que mandé un SMS para que me dejaran entrar a la edición digital):

El gobernante debe sufrir (sin demora)

ENRIC JULIANA - Madrid
En toda sociedad acomodada - en España, por ejemplo- el momento más arriesgado para el poder político es hoy el de la Fragilidad Evidente. Atentados terroristas, catástrofes naturales y alarmas sanitarias han visto potenciada su naturaleza doblemente lesiva: el daño objetivo que producen y la insoportable sensación de desamparo que transmiten. Transferidos a las instancias imperiales,los poderes que antaño podían hundir abruptamente a cualquier país europeo en la infelicidad y la desgracia - declarar la guerra, extender la leva, poner y sacar aranceles, y devaluar la moneda-, los viejos estados nacionales bordean la quiebra moral cuando un acontecimiento inesperado pone al desnudo sus nuevos y restringidos límites. Cuando lo Imprevisto los desborda bajo la luz cegadora de los focos.

Amenazada la legitimidad del poder no transferido al esbozo imperial europeo, el gobernante debe cumplir nuevos rituales para restablecer la tranquilidad pública. El gobernante debe sufrir a la vista de todos, compartiendo en vivo y en directo, lo más rápidamente posible, el dolor de los damnificados y la fragilidad manifiesta de la ciudadanía. Debe someterse de inmediato al riesgo del escarnio público - cuanta más rapidez, más veracidad- para fortalecerse de nuevo. Debe desmentir ritualmente lo que todos intuimos o sospechamos: que el poder habita cada vez más más lejos, transformado en un entidad metafísica, inaprensible y huidiza.

Hay gobernantes muy bien dotados para captar ese momento clave y fundamental de la moderna tragedia griega - el socialdemócrata Schröder ganó unas elecciones gracias a su instinto en una inundaciones-, pero no es raro que el aturdimiento los paralice, o los atrape la visión racional y política de los hechos.

Le ocurrió a José María Aznar tras el hundimiento del petrolero Prestige y en las horas inmediatamente posteriores a la gran matanza del 11-M. Y puede que le haya ocurrido ahora a José Luis Rodríguez Zapatero. Fuentes próximas al presidente del Gobierno señalan que mantiene absolutamente vivo el convencimiento de que es posible acabar pronto con ETA, ante el escepticismo de algunos de sus más inmediatos colaboradores y la creciente preocupación de los dirigentes y cuadros medios de su partido, que comienzan a temer por la suerte del PSOE en las elecciones municipales y autonómicas del mes de mayo.

Zapatero, dicen, habla estos días de la necesidad de no perder la perspectiva. Pero las leyes de la moderna tragedia griega son inexorables: el gobernante debe sufrir, sin retraso alguno, bajo la luz cegadora de los focos.
Señor Juliana: si en verdad me lee, vendrá por aquí y encontrará este post. Está hecho con buen humor, deportividad y con la única intención de hacer un juguete de entretenida discusión. Como se puede leer en su artículo, tiene fuentes próximas a Moncloa y yo no. De hecho, mandé un mail a Moncloa preguntando por el Belén de Barajas y hasta hoy, que debe ser él último día de la maqueta, no he tenido respuesta. Los bloggers no somos medios.